20 ¶ Después de todas estas cosas, luego de haber Josías preparado la Casa, Necao rey de Egipto subió a hacer guerra en Carquemis junto a Eufrates; y salió Josías contra él. 21 Y él le envió embajadores, diciendo: ¿Qué tenemos yo y tú, rey de Judá? Yo no vengo contra ti hoy, sino contra la casa que me hace guerra; y Dios dijo que me apresurase. Déjate de meterte con Dios, que es conmigo, no te destruya. 22 Mas Josías no volvió su rostro de él, antes se disfrazó para darle batalla, y no escuchó las palabras de Necao, que eran de boca de Dios; y vino a darle la batalla en el campo de Meguido. 23 Y los arqueros hirieron al rey Josías con una flecha; y dijo el rey a sus siervos: Quitadme de aquí, porque estoy herido gravemente. 24 Entonces sus siervos lo quitaron de aquel carro, y lo pusieron en otro segundo carro que tenía, y lo llevaron a Jerusalén, y murió; y lo sepultaron en los sepulcros de sus padres. Y todo Judá y Jerusalén hizo duelo por Josías. 25 Y endechó Jeremías por Josías, y todos los cantores y cantoras recitan sus lamentaciones sobre Josías hasta hoy; y las han vuelto en ley en Israel, las cuales están escritas en las Lamentaciones. 26 Lo demás de los hechos de Josías, y sus misericordias, conforme a lo que está escrito en la ley del SEÑOR, 27 y sus hechos, primeros y postreros, he aquí todo está escrito en el libro de los reyes de Israel y de Judá.