24 Y cuando vino Judá a la atalaya del desierto, miraron por la multitud; y helos aquí que estaban tendidos en tierra muertos, que ninguno había escapado. 25 Y viniendo Josafat y su pueblo a despojarlos, hallaron en ellos muchas riquezas, y cuerpos muertos, y vestidos y vasos preciosos, los cuales tomaron para sí, tantos , que no los podían llevar; tres días duró el despojo, porque era mucho. 26 Y al cuarto día se juntaron en el valle de Beraca (de la bendición ); porque allí bendijeron al SEÑOR, y por esto llamaron el nombre de aquel paraje el valle de Beraca, hasta hoy. 27 Y todo Judá y los de Jerusalén, y Josafat a la cabeza de ellos, volvieron para regresar a Jerusalén con gozo, porque el SEÑOR les había dado gozo de sus enemigos. 28 Y vinieron a Jerusalén con salterios, arpas, y bocinas, a la Casa del SEÑOR. 29 Y vino el pavor de Dios sobre todos los reinos de la tierra, cuando oyeron que el SEÑOR había peleado contra los enemigos de Israel. 30 Y el reino de Josafat tuvo reposo; porque su Dios le dio reposo de todas partes.
31 ¶ Así reinó Josafat sobre Judá; de treinta y cinco años era cuando comenzó a reinar, y reinó veinte y cinco años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Azuba, hija de Silhi. 32 Y anduvo en el camino de Asa su padre, sin apartarse de él, haciendo lo recto en los ojos del SEÑOR. 33 Con todo eso los altos no eran quitados; que el pueblo aun no había enderezado su corazón al Dios de sus padres.
34 Lo demás de los hechos de Josafat, primeros y postreros, he aquí están escritos en las palabras de Jehú hijo de Hanani, del cual es hecha mención en el libro de los reyes de Israel.