5 ¶ Y a unos que decían del Templo, que estaba adornado de hermosas piedras y dones, dijo: 6 Estas cosas que veis, días vendrán que no quedará piedra sobre piedra que no sea destruida. 7 Y le preguntaron, diciendo: Maestro, ¿cuándo será esto? ¿Y qué señal habrá cuando estas cosas hayan de comenzar a ser hechas? 8 El entonces dijo: Mirad, no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy; y, el tiempo está cerca; por tanto, no vayáis en pos de ellos. 9 Pero cuando oyereis guerras y sediciones, no os espantéis; porque es necesario que estas cosas sean hechas primero; mas aún no será el fin.