The Parable of the Seed Growing

Mark 4

26 Decía más: Así es el reino de Dios, como si un hombre echa simiente en la tierra; 27 Y duerme, y se levanta de noche y de día, y la simiente brota y crece como él no sabe. 28 Porque de suyo fructifica la tierra, primero hierba, luego espiga, después grano lleno en la espiga; 29 Y cuando el fruto fuere producido, luego se mete la hoz, porque la siega es llegada.

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